02 Mar El Observatorio Valenciano contra la LGTBIfobia condena enérgicamente el transfeminicidio de Castellón.
A la condena, se suman las organizaciones LGTBI de Castellón, consternadas por el grave suceso, como Castelló LGTBI y Colectivo LGTBIQ Queer Fest, cuyos representantes han rechazado enérgicamente el asesinato.
El Observatorio recuerda que durante el 2018 la cifra de incidentes y delitos de odio se ha disparado a 91 casos registrados, un 12% más que el año anterior, y que van desde las más graves, como agresiones con lesiones incapacitantes a insultos, amenazas acoso y hostigamiento.
En la provincia de Castellón se han triplicado el registro de incidentes discriminatorios, de 8 a 21, concentrando la mayor parte de los acaecídos en zonas turísticas durante el verano de 2018.
El Observatorio Valenciano contra la LGTBIfobia, y las principales organizaciones para la defensa de lesbianas, gais, bisexuales, trans e intersexuales de Castellón, Castelló LGTBI y Colectivo LGTBIQ Queer Fest de Castelló, han condenado enérgicamente el asesinato de la mujer trans ocurrido en la ermita de Sant Jaume de Fadrell, que consideran un transfeminicidio, y piden que las investigaciones sean rápidas y eficaces y se detenga al culpable o culpables del crimen. Recuerdan que lo principal es determinar quién o quienes han sido los agresores y que sean puestos a disposición judicial cuanto antes. En ese sentido, alertan de que en algunos medios de comunicación se ha difundido la información de que había aparecido “un hombre disfrazado de mujer”, lo que caricaturiza a la víctima, la revictimiza y vulnera su dignidad. Los responsables LGTBI aclaran que “un hombre disfrazado” no es una persona cuya identidad de género no se corresponde con el sexo asignado al nacer, que el sexo biológico no determina la identidad, y que negar la identidad a la víctima es revictimizar a las personas, someterlas a un señalamiento público innecesario y desinformar, alentar el prejuicio y el estereotipo.
Para las organizaciones LGTBI seguimos viendo como las personas trans, concretamente las mujeres trans, siguen en situaciones de enorme vulnerabilidad y exclusión social, así como desprotección máxima. En ese sentido, el director del Observatorio contra la LGTBIfobia lamenta que “todavía queda mucho por hacer para lograr la plena inclusión, y conseguir que las personas trans, que son rechazadas de forma sistemática por la sociedad, puedan abandonar la calle, que pone en riesgo su vida e integridad moral y física”. Existe, según Abad, “un gran número de mujeres trans que ejercen la prostitución que son sometidas constantemente a la violencia y que no denuncian por su situación personal, la incomprensión de los funcionarios policiales, jueces y fiscales o de la sociedad en su conjunto” . Es por ello que, señala Abad, “pediremos la activación del artículo 41.3 de la ley trans valenciana, en caso de que haya un componente claramente discriminatorio, para que la Generalitat se persone como interesada en el procedimiento judicial, y así garantizar que se respeta la dignidad de la víctima como mujer trans, y evitar lo que ha sucedido en otros asesinatos por transfobia en la Comunitat como el no reconocimiento de la identidad de género, y por lo tanto, de negación de raíz de transfobia”. «No permitiremos», puntualiza Abad, «que en el procedimiento judicial se niegue su identidad de género».
Estado de la LGTBIfobia en la Comunitat
Durante el 2018 se han registrado por parte del Observatorio Valenciano contra la LGTBIfobia 91 incidentes y delitos de odio contra personas por su orientación sexual y su identidad o expresión de género, entre los que destacan agresiones leves más habituales , insultos, amenazas, acoso y hostigamiento hasta graves, con lesiones discapacitantes. El perfil del agresor sigue siendo un adulto varón entre 25 y 40 años y se observa como la mayoría de las víctimas oscilan entre edades que van desde los 18 a los 30 años. La evolución más notable se ha producido en la provincia de Castellón, que han aumentado el registro de incidentes y delitos de odio de 8, registrados en 2017 a 21 incidentes registrados, lo que supone triplicar la cifra de 2017 respecto a 2018.
En ese sentido, Toño Abad, director del Observatorio, recuerda que “es imprescindible desarrollar la ley LGTBI de la Comunitat Valenciana aprobada en noviembre de 2018, que contiene medidas para erradicar la LGTBIfobia, su prevención y condena, como son la formación a los cuerpos de las policías locales de la Comunitat en ciudades de más de 50 mil habitantes”. Abad incide en que “la Policía Local es la más cercana a la ciudadanía y la que más habitualmente acude cuando se ha sufrido una agresión homofóbica o tránsfóbica, por lo que se hace necesario formar a estos funcionarios, aunque no es suficiente, exigimos implicación del Ministerio del Interior para que haya agentes de enlace en Guardia Civil y Policía Nacional, formados y especializados, a quien poder acudir en caso de que tengamos constancia de una agresión discriminatoria, lo que ya se hace en otros tipos de crímenes (xenofobia, por ejemplo). Las organizaciones que defendemos los derechos de las personas LGTBI nos sentimos muy desamparadas en el trato con aquellos que tienen que cuidar de que no se vulneren nuestros derechos y que se proteja nuestra seguridad”.